Piómetra

Es la acumulación de pus o material purulento en el útero, con persistencia del cuerpo lúteo y anestro, debido a fallas en la liberación y/o vehiculización de prostaglandinas, consiste en una endometritis o metritis según otros autores, purulenta crónica (de 4to grado), con retención en el útero de pus.

Hay anestro por la persistencia del cuerpo lúteo, que sigue a la 1ª 2ª ovulación, pero no corresponde a un Cl de gestación, ni a la distensión uterina.

Puede ocurrir luego del servicio, luego de un parto normal o en el post parto, siendo las causas:

·       Infección uterina

·       Involución uterina tardía

·       Abortos

·       Partos prematuros

·       Distocias

·       Retención de placentas

·       Metritis séptica o endometritis

·       Otras causas son inseminación de vacas preñadas que muestran celo, fetos macerados, o enfermedades venéreas infecciosas o parasitarias.

Síntomas: se caracteriza por la retención de pus y anestro.

Hay 2 tipos de piómetra, las abiertas en las que el contenido se pierde en parte porque el cérvix está abierto, mientras que en las cerradas no hay flujo y el animal se enferma de manera mucho más aguda.

La Piómetra verdadera persiste hasta después de los 60 - 90 días luego del parto con anestro, o puede seguir al servicio asociándose con la muerte temprana y maceración (ej trichomoniasis)

Al tacto rectal encontramos:

·       El tamaño uterino variable, pudiendo llegar a ser como una preñes avanzada.

·       Los cuernos están iguales, pero según Roberts están desiguales como una preñes

·       No se palpa feto ni placentomas, ni hay deslizamiento de las membranas.

·       El contenido es espeso por el pus y no acuoso como una preñes normal

·       Paredes engrosadas y sin tono

·       No hay frémito

·       hay persistencia del CL

A la exploración vaginal encontramos:

·       Flujo vaginal mucoso espeso, cremoso de color amarillo, blanco o verde grisáceo.

·       puede que el flujo sea temporal, la expulsión se debe al aumento de la presión uterina.

·       El cérvix está cerrado (o abierto según el tipo de piómetra)

Cuando es una piómetra a cuello abierto parte del pus escapa al echarse la vaca, orinar o defecar;  ya que el pus tiende a bajar por gravedad y acumularse en la porción libre del cuello;  en estos casos se puede pasar un catéter por el cuello y extraer algo de pus .

En las yeguas viejas la piómetra es más frecuente que en otras especies, al tacto rectal hay engrosamiento pastoso de la pared uterina, fluctuación, puede endurecerse en caso de ser un proceso crónico.

Diagnóstico Diferencial:

1 - con una preñes normal, se localiza la arteria uterina media que tiene frémito; además en la piómetra no se palpan las estructuras, anexos, carúnculas y hay persistencia del CL.

2 - Con una metritis post parto, se presenta con descarga mucopurulenta 2 o 3 semanas post parto, y en la mayoría de los casos demuestran celo y ciclos regulares, en la piómetra el pus se expulsa por lo general entre los 60 - 90 días.

3 - con una hidrómetra, es esta hay un adelgazamiento notable de la pared uterina, al tacto rectal hay contenido acuoso.

4 - con hematómetra, el flujo vaginal es o no purulento pero si sanguinolento.

5 - con una mixómetra, la consistencia de las secreciones mucho más acuosas o mucosas.

Pronóstico: la curación, capacidad reproductiva al igual que en las metritis de distintos grados va a depender de;

·       La duración de la enfermedad, en casos de 60 - 120 días es más probable la recuperación que en casos de más de 120 días

·       De la edad del animal

·       Del tipo de bacteria actuante, y enfermedades concomitantes genitales.

El pronóstico es desfavorable cuando hay destrucción de la mucosa y lesión del miometrio con cambio fibróticos que impiden la concepción por más que sea evacuado el pus.

Son de difícil curación los procesos crónicos y más en animales viejos.

Si se produce por tuberculosis se impone el sacrificio del animal

Diagnóstico: se obtienen muestras para analizar a nivel de laboratorio, biopsias, hisopados cervical, análisis de líquidos obtenidos por lavados uterinos con suero fisiológico, etc.

Para bovinos y equinos no sirve el recuento leucocitario.

Tratamiento: el mismo intenta la involución del cuerpo lúteo para restablecer el ciclo estral, favorecer la contracción del útero al desaparecer la progesterona, dilatar el cérvix y evacuar su contenido.
Puede usarse estrógenos (estradiol 5 - 10 mg i/m), la combinación de estos con glucocorticoides, también ha dado buenos resultados el uso de prostaglandinas PG2alfa.

Se instaura una terapia de antibiótico parenteral y local.

Como último recurso por el riesgo de hemorragias esta la enucleación manual del Cl, además es dificultosa y acarrea otras consecuencias, como adherencias permanentes.

Restablecida la vaca se le da servicio recién a los 3 o 4 periodos de celo.

Prevención: Tratamiento inmediato de vacas con descarga mucopurulenta post-parto.

PIÓMETRA EN PERRAS:

Es  un desorden diestral polisistémico agudo o crónico de la perra adulta hormonalmente mediado, que resulta en un endometrio anormal y subsecuente infección bacteriana,  asociada a lesiones extra genitales que  resulta en una toxemia grave, con vómitos, shock y muerte del animal.

Probablemente sea la enfermedad más importante del tracto reproductivo de la perra se trata de un proceso común y muy grave en el cual el útero se llena de líquido, que puede o no contener bacterias.

La toxemia resultante de la absorción del contenido uterino origina los signos característicos del proceso, especialmente sed excesiva (por la glomerulonefritis que se presenta), vómitos (por la toxemia e insuficiencia renal), inapetencia, anorexia, normalmente no hay fiebre, deshidratación, shock y muerte.

La enfermedad se presenta habitualmente 4 - 6 semanas post estro pero se ha diagnosticado en algunas perras con extremos que van desde final del celo, hasta las 12 - 14 semanas.

La piómetra aparece principalmente en perras adultas (más de 5 años) que no se han reproducido; sin embargo el problema también se ha descripto en animales jóvenes.

Hay 2 tipos principales de piómetra , abierta y cerrada ; en las abiertas el contenido del útero se pierde , al menos en parte a través de la vagina ya que el cérvix está abierto, en  las cerradas no hay flujo y el animal se enferme de manera mucho más aguda .

La incidencia de piómetra es alta, siendo la causa presumiblemente un desorden hormonal progresivo unido a la sensibilidad del útero canino a la progesterona; se cree que la secuencia de una dominancia estrogénica seguida de una prolongada dominancia de la progesterona origina una hiperplasia quística endometrial que puede ir seguida de mucómetra o piómetra.

Está comprobado que los estrógenos aumentan los efectos estimulantes de la progesterona sobre el útero, la enfermedad puede ser inducida por fármacos o aparecer de forma espontánea, puede desencadenarse por el empleo imprudente de estrógenos para la cubrición no deseada o productos hormonales (progestágenos) para el control del celo.

El aumento del nivel de la progesterona promueve el crecimiento de la mucosa uterina mientras que la actividad miometrial decrece causada por un CL persistente o quístico, se desarrolla una hiperplasia endometrial y acumulación de las secreciones uterinas, las cuales son un excelente medio para el cultivo de bacterias.

El diagnostico se basa en la presencia de los signos clínicos en la etapa del diestro, rayos X y análisis de laboratorio para lo cual se realiza extracción de orina y sangre con anticoagulantes para conteo de glóbulos blancos; en las perras con piómetra a cuello cerrado esta aumentado entre 20.000 - 100.000 por mm, hay leucocitosis con neutrofilia e inmadurez de leucocitos.

Es común también la anemia normocrómica, normocítica y no regenerativa por la depresión a nivel de la medula o sea, hay también hiperproteinemia creatinina en sangre, y orina isostenúrica (1,003- 1,007) por la insuficiencia renal.

Diagnóstico diferencial: se hace con vaginitis y otras causas de poliuria- polidipsia, también con estro y preñes. (Rayos X y hemograma) 

En la mayoría de los casos el tratamiento de elección consiste en la extirpación quirúrgica del útero y ovarios, especialmente en casos de piómetra cerrada, en las abierta es posible emplear a veces medicación para evacuar el contenido (prostaglandinas) pero el proceso vuelve a aparecer en la mayoría de los casos al celo siguiente.

Los animales muy enfermos requieren terapia de fluidos I/V a base de ringer lactato + bicarbonato de sodio, antibióticos de amplio espectro inyectables durante 7 - 10 días.

La terapia médica a base de prostaglandinas u hormonas se utiliza en perras valiosas o en las que la cirugía implicara un gran riesgo de vida, no debe utilizarse este tratamiento en perras mayores, ni en piómetras a cuello cerrado.

Texto: Javier López