Mastitis en la perra

Generalmente tiene origen en el post-parto, es una complicación de este. Tiene origen piógeno. Se puede dar en forma aguda o crónica. Puede comprometer la vida del animal y a veces el pronóstico es reservado. Puede afectar 1 o más glándulas. Debemos hacer una inspección/palpación de todas las mamas de la perra.

Sintomatología: Las mamas están calientes y duras, tumefactas, hay inflamación y dolor. Hay aumento de la temperatura corporal (41 o 42ºC), depresión, anorexia, falta de interés en los cachorros, etc.  Puede haber secreción purulenta que varía del color rosado al gris pardo. Los cachorros están inquietos, gritan, se ponen débiles y mueren.

Tratamiento:

- Conservador: damos gran cantidad de antibióticos. Si la infección es a coli o Estafilo, se producen abscesos en las mamas, por lo que debemos realizar también un tratamiento quirúrgico.   

- Quirúrgico: consiste en la incisión y drenaje de los abscesos. Los abscesos muchas veces dificultan la llegada de los antibióticos por vía sanguínea hasta donde están los patógenos.

Si la mastitis es aguda y la perra está recién parida, conviene hacer tratamiento 2 veces por día. Si los síntomas de inflamación de la línea de las mamas y la temperatura bajan y me indican una recuperación, podemos espaciar el tratamiento a una vez por día. El tratamiento debe hacerse durante 4 o 5 días en total. Se utilizan antibióticos de amplio espectro como la Penicilina Estrepto (buena para estreptococos, estafilococos y colibacilos). 

Dosis: dependen mucho de la raza. Por lo general se da 1 ¿millón? de U.I. /día.

Si hay tendencia a la mastitis recurrente debemos hacer profilaxis con un tratamiento antibiótico preparto hasta una semana antes de parir. Se dan antibióticos durante 3 o 4 días.   

Texto: Gissel Escudero